NO LO HAGAS JAMÁS

7 comments
NO LO HAGAS JAMÁS

Hoy quiero contarles una historia aterradora que por fin ha acabado. Hace mucho tiempo atrás, billones de años antes, fui un humano completamente perdido, disconforme, hastiado de la vida, infeliz, oscuro, víctima y asesino. Sí, un terrible asesino. ¿Por qué?  Por cobarde. 
Si en ese tiempo hubiese sabido lo que me ocurriría luego de ese acto atroz, les juro que nunca jamás lo hubiese hecho. En ese tiempo, pasé por momentos tan terribles y no los supe enfrentar, al grado de querer matarme. 
Pero no se quedó en solo querer, sino que una tarde lo hice. Una soga, el aire del techo, una silla y mis intenciones. Me colgué, sin más. Jamás,  jamás,  jamás lo volvería a hacer. Han sido billones de años de sufrimiento, del más terrible e inimaginable. Calvario, mil estacas en el corazón o la flagelación no se compara con el terror que viví.
Ni siquiera el castigo de cortar la piel poco a poco, rebanando cada parte de tu ella en pequeños trozos, se puede comparar con un segundo en el infierno que he atravesado. Eso lo hubiese pasado con gusto, una y otra vez, solo por no volver a experimentar otra vez el espanto. 
No, no, no. ¿Crees que no pagarás el quitarte la vida tú mismo? Actuando en contra de toda lógica, de toda fe, de toda ley. Sí, lo harás. No te quepa duda. La vida no termina con la expiración del cuerpo humano, si lo sabré yo. Lo pagarás, quedarás triturado por las Fuerzas del Destino. Horrores, espanto,  perdición, cercenándote por completo. Así quedará tu alma.
Vengo hoy a decirte que piensas en suicidarte, ten fuerza para encarar tus acciones y las situaciones de la vida, porque nadie puede hacerlo más que tú. Si no te enfrentas, créeme, lo pagarás demasiado caro, el peor horror que puedas imaginar no sera ni la milésima parte que sufrirá tu alma por tal acto. Nunca lo hagas. Si ya lo has intentado y has fallado,  da gracias por eso, pero nunca más lo intentes. Te lo digo porque sé que es así, si no no me atrevería.
Hoy he salido de mi irrevocable calvario. Mi alma está aturdida y puesta de nuevo en la tierra. Sé que las experiencias que tendré me harán querer morir de nuevo, pero NUNCA lo haré de nuevo. Prefiero que me despellejen vivo antes de volver a pasarlo. NUNCA JAMÁS. Te recomiendo que tú nunca lo hagas y si lo hiciste,  no lo vuelvas a intentar. Detente antes del horror.
Me llaman. Debo irme. Por favor, hazle caso al que te escribe, escúchame. No lo hagas. Libérate del infierno del dolor. Ojalá me oigas. Ten fuerzas.
Se despide,
un amigo que ha visto.

Derechos Reservados
Dayana Rosas

7 comentarios

  1. Excelente manifiesto, hay horrores que te desgarran de tal modo que ninguna advertencia puede detenerte y si hay otras vidas (que eso creo positivamente) no dudo de que lo vuelvas a intentar. En eso consiste el calvario del Infierno.
    Muy buen texto Day, sorprendente

    ResponderBorrar
  2. Muchísimas gracias, mi Marce. Creo firmemente en esto. Y creo que si se puede evitar. Y en algún momento tendrán que aprender a no quitarse la vida.

    ResponderBorrar
  3. ¡Muy bueno, Daya! Un excelente consejo envuelto en un relato aleccionador. Hermoso blog.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Muchísimas gracias, Pituti querido. Por leer y opinar, además escribirlo aquí. jajaja Un gran abrazo.

      Borrar